miércoles, 5 de noviembre de 2008

Qué mesias?

Tras la desbordada alegría que se vive en el mundo "progresista" (y sigo sin saber qué narices quiere decir esa palabra), por que ya ha llegado el "mesias" a salvarnos, y conociendo los antecedentes y la limitada capacidad de maniobra con que cuenta, hago la siguiente reflexión:
He visto en los últimos meses como por unanimidad se afanaban en poner parches en las ruedas (es un símil), hicharlas a cada rato y otras tantas marrullerías para que sigan "rulando". Y no se me ocurre nada más que lanzar un insulto que lo dejaré en ¡ignorantes!, aún a sabiendas de que del todo no lo son.
Y es que ya no vale jugar con el IPC, el PIB, el IPI, los tipos de interés, la bolsa, el precio del petróleo o el cambio de la moneda. NO.
El sistema está agotado porque, como dice el refrán "se coge antes a un embustero que a un cojo", y esto ha sido mentira, es mentira y será mentira (no entraré en detalles, ¿son acaso necesarios?).
Yo no tengo la receta, ni creo que se pueda resolver en un santiamén; pero cualquier mente normal puede intuir que el "nuevo sistema" ha de pasar por nacionalizar los recursos naturales, incluida el agua, con el fin de evitar guerras e injusticias, y luego tener que hacerlo por "huebos" (ojo que está con "b") como está pasando con la banca, y por estatalizar, quiero decir por situar bajo un control estricto del estado, los cuatro pilares en que se sustenta la actual sociedad: sanidad, enseñanza, seguridad y banca.
Cuidando de que las estructuras o controles que los soporten sean eficaces y eficientes, para que no se conviertan en enormes órganos burocráticos y/o de corrupción (curiosamente la primera nació para evitar la segunda). Y, a partir de ahi, caminar hacia un mundo de gobiernos cada vez más coordinados, tarea tan urgente como necesaria para lograr que haya vida después de la muerte.